México:

El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró el sábado a los mexicanos que goza de buena salud después de pasar la noche en el hospital para someterse a un cateterismo cardíaco como parte de un chequeo regular.

En un video, López Obrador se sentó detrás de un escritorio y dijo mesuradamente que los médicos lo habían autorizado a continuar con su trabajo.

“Descubrieron que las arterias estaban bien, sin obstrucciones”, dijo el líder izquierdista en el video publicado en Twitter. “Ahora estoy de regreso aquí en el Palacio (Nacional), muy tranquilo y muy feliz”.

López Obrador, de 68 años, quien sufrió un infarto severo en 2013 y se recuperó recientemente de su segunda infección por coronavirus, también dijo que dejó “voluntad política” en caso de que muriera para que el gobierno pueda seguir con su proyecto político.

“Hay que garantizar la gobernabilidad, entonces tengo voluntad para eso”, dijo López Obrador. “Afortunadamente, no creo que sea necesario”.

López Obrador se sometió al procedimiento como parte de un chequeo semestral que incluye pruebas de laboratorio, electrocardiogramas, pruebas de esfuerzo y tomografías computarizadas, dijo el gobierno el viernes.

El cateterismo cardíaco inserta un tubo delgado en un vaso sanguíneo grande que va al corazón y puede detectar que el corazón está funcionando correctamente.