El Instituto Nacional de Migración (INM) de México deportó este miércoles a 129 migrantes haitianos que se encontraban en situación irregular en México, informó el organismo en un comunicado.

“Este miércoles, el Instituto Nacional de Migración (INM) realizó la repatriación de migrantes desde Haití, en cumplimiento de los derechos humanos y en acuerdo con las autoridades consulares de ese país”, se lee en la nota.

El INM no precisó el número total de personas, cuántas eran mujeres, hombres y menores de edad.

El traslado se realizó en avión desde la ciudad de Tapachula, en el sureño estado de Chiapas, hasta el aeropuerto internacional de Puerto Príncipe, la capital del país caribeño.

“Estas acciones forman parte de la mesa de diálogo permanente, instalada el 21 de septiembre en la sede del INM, entre los representantes del Gobierno de México y Haití, con el fin de atender las necesidades de la población migrante de origen haitiano, ubicada en la territorio nacional”, dijo el organismo en un comunicado.

Con ello aprobaron el compromiso de “una migración segura, ordenada y regular con pleno respeto y protección de los derechos humanos, así como fortalecer los lazos de cooperación entre el gobierno de México y otras naciones a favor de quienes se encuentran en contexto de movilidad.

En los últimos meses, el sur de México ha experimentado un flujo migratorio histórico con 147,000 inmigrantes indocumentados detectados en México de enero a agosto, el triple que en 2020, y un récord de 212,000 inmigrantes indocumentados detenidos solo en julio por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP). , en inglés) de los Estados Unidos.

A principios de septiembre, cuatro caravanas de migrantes partieron de Tapachula, municipio del suroriental estado de Chiapas, fronterizo con Guatemala, muchos de ellos haitianos, pero todos fueron desmantelados en duros operativos por parte de las fuerzas de seguridad.

Desde octubre de 2018, y pese al recrudecimiento de la vigilancia en la frontera sur de México, miles de migrantes centroamericanos, pero también de Cuba, Haití y varios países africanos y asiáticos han ingresado a territorio mexicano con el objetivo de llegar a Estados Unidos.