“La organización monitorea la situación de migrantes y refugiados en la carretera costera de Tapachula a Tuxtla Gutiérrez, Chiapas (sureste de México) – con especial énfasis en la situación de niños, niñas y adolescentes – y ha identificado casos de lesiones graves y separación de familias ”, dijo UNICEF en un comunicado.
En los últimos días se han formado tres caravanas de migrantes con cientos de personas cada una, desde Tapachula, en el estado de Chiapas, en el norte de México, hasta Estados Unidos.
Sin embargo, los dos primeros ya fueron disueltos por las autoridades, recibiendo críticas de ONG y agencias por el uso de la fuerza.
En estas caravanas, UNICEF dijo haber identificado “un uso desproporcionado de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad contra familias con niños pequeños, además del robo y destrucción de documentos de identidad que garantizan la permanencia legal de la caravana. Estas familias en México”.
Como resultado, los empleados involucrados en los hechos fueron suspendidos, lo que UNICEF reconoció como positivo.
La organización dijo que muchos de los niños de la caravana están deshidratados y además tienen un acceso muy limitado a los servicios esenciales “para su bienestar físico y emocional, nutrición, educación y protección”.
El flujo migratorio ha aumentado en México desde octubre de 2018, cuando caravanas con miles de migrantes, en su mayoría centroamericanos, comenzaron a ingresar al país para llegar a Estados Unidos, lo que llevó al entonces presidente Donald Trump a presionar a México para que los detuviera.
Cuando el presidente Joe Biden llegó a la Casa Blanca, suspendió el programa “Quédese en México” de su predecesor, que requería que los solicitantes de asilo esperaran su audiencia en territorio mexicano.
Con eso, el flujo migratorio se recuperó, por lo que Estados Unidos detuvo a 212 mil 672 migrantes indocumentados en la frontera sur en julio, la cifra más alta en 20 años.
El Instituto Nacional Mexicano de Migraciones (INM) dijo que entre enero y ayer había identificado a 34 mil 427 menores, acompañados y no acompañados, que transitaban por territorio mexicano en condiciones irregulares.
La agencia mexicana de inmigración señaló que este flujo de población se ha triplicado en comparación con el mismo período de 2020, durante el cual se identificaron 11,703 menores, acompañados y no acompañados.
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