La Agencia Internacional de Energía Atómica (OIEA) afirmó en un comunicado que las fuerzas armadas rusas, que tomaron la central nuclear de Zaporizhzhya en Ucrania, han implementado uniformes de seguridad y han restringido las comunicaciones con el mundo exterior.

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Lo anterior genera “extrema preocupación” entre los miembros de la OIEA, ya que es el mayor regulador de energía nuclear.

“Ucrania informa que todas las acciones tomadas por la gerencia de la planta, incluidas las medidas relacionadas con el funcionamiento técnico de las seis unidades del reactor, requieren la aprobación previa del comandante ruso”, dijo la agencia en el comunicado.

También indica que las fuerzas rusas han inhabilitado las redes de telefonía celular e Internet para que no se pueda obtener información confiable a través de los canales de comunicación normales del sitio.

En este sentido, la OIEA indicó que el regulador nuclear ucraniano había explicado que solo podían comunicarse por correo electrónico, como sucedió en la fábrica de Chernobyl, que fue tomada por soldados rusos el 24 de febrero.

También fue abundante que las fuerzas rusas tomaron el control de la fábrica el viernes pasado después de incendiar una instalación de entretenimiento adyacente, por lo que las autoridades del Ministerio de Defensa calificaron el ataque de “provocación monstruosa”.

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Ucrania tiene un total de cuatro plantas de energía nuclear activas, que producen alrededor de la mitad del consumo de electricidad del país.