Este tipo de encuentros, que se realizan anualmente en Cuba, son cada vez mejores, y este último, el séptimo, es el de mayor profundidad y eficacia, afirmó el director ejecutivo.

En la declaración final, los participantes expresaron su conciencia sobre el grave impacto del cambio climático y otros factores en la agroindustria.

También expresaron su compromiso de hacer lo necesario para avanzar en la recuperación de este importante sector de la economía de ambos países.

También expresaron su disposición a compartir experiencias y propuestas concretas para superar los problemas actuales que aquejan a la producción azucarera.

Asimismo, ratificaron la validez de estos encuentros, demostrada por la calidad y pertinencia de las propuestas de las presentaciones y debates, y coincidieron en brindar el potencial científico y técnico para el desarrollo sostenible de la agroindustria de la caña de azúcar.

Reconocieron también la importancia de restaurar el potencial de las agroindustrias cubanas y mexicanas para que sean eficientes, diversificadas y flexibles, así como el papel de la ciencia y la tecnología en el logro de ese objetivo.

Ambas asociaciones coincidieron en la necesidad de encaminar acciones en busca de soluciones a los problemas técnicos y operativos que hoy provocan el deterioro de la producción de caña de azúcar y obstaculizan la eficiencia agroindustrial.

La Octava Reunión Técnica ATAC-ATAM se llevará a cabo en noviembre de 2024.

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