Hoy, unas 600 personas han comenzado a caminar por la vía que conecta las ciudades de Tapachula y Huehuetán. Muchos llevaban niños en brazos, así como maletas y botellas de agua.
La caravana de migrantes está formada por personas de distintas nacionalidades, entre ellas haitianos, cubanos, venezolanos, hondureños y salvadoreños.
Este es el segundo grupo que inicia la caminata en al menos tres días, luego de la salida del primero con unas 700 personas que quieren ir a Estados Unidos.
Este domingo, en un operativo en el estado de Chiapas, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, garantizó que el gobierno del país seguirá “restringiendo” la inmigración, luego de intentar poner fin a la primera caravana.
Sin embargo, el presidente instó a Estados Unidos a actuar también para frenar la inmigración e introducir soluciones como ofrecer visas de trabajo a personas de países centroamericanos.
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