Héctor Alvarado, copropietario de Little Mexico, dijo que se le ocurrió la idea de una ubicación en Virginia porque vio que muchos clientes de la ciudad visitaban las otras ubicaciones. Más tarde vio una “muy buena oportunidad” para comprar el edificio que alberga el restaurante.

Alvarado dijo que tomó cerca de 10 meses renovar el edificio, lo que involucró la instalación de nuevos sistemas de alcantarillado y electricidad.

“Es un edificio muy antiguo”, dijo. “Hemos cambiado todo”.

Antes de que abriera el restaurante, Alvarado llevó el camión de comida Little Mexico a Virginia para preguntar a los clientes qué buscaban en un restaurante. Algunos de ellos dijeron que querían desayunar, por lo que solo el restaurante Virginia sirve un desayuno americano de 6 a. m. a 11 a. m. todos los días, con una posible extensión a la 1 p. m. en el futuro.

El negocio en la nueva ubicación se ha desempeñado relativamente bien para un nuevo restaurante, dijo Alvarado, y agregó que espera que el negocio continúe mejorando a medida que más personas se den cuenta de que está abierto.

“No es tan malo”, dijo sobre los negocios. “Es bastante bueno.”