NAIROBI (Reuters) – Kenia dijo el lunes que estaba recortando los salarios de altos funcionarios, incluidos el presidente y los legisladores, y recortando sus asignaciones, ahorrando a la economía de África Oriental 8.500 millones de chelines (81,90 millones de dólares) al año.

El anuncio se produce antes de las elecciones del 8 de agosto, cuando Kenia elegirá un presidente, legisladores y otros funcionarios regionales, y seguramente será visto favorablemente por el votante promedio de Kenia, que ve a los parlamentarios en particular como símbolos de una cultura política codiciosa.

En 2013, los legisladores, que ya estaban entre los mejor pagados del mundo, votaron a favor de aumentar sus salarios a más de 130 veces el salario mínimo, a pesar de los planes del gobierno de recortarlos como parte de las reformas del gasto.

La Comisión de Salarios y Remuneración, que asesora al gobierno sobre los salarios de los trabajadores del sector público, dijo que los parlamentarios ganarían ahora 621.250 chelines al mes, en comparación con los 710.000 chelines anteriores.

Dijo que el salario del presidente se reduciría de 1,65 millones de chelines a 1,44 millones de chelines por mes, mientras que su diputado, de 1,4 millones de chelines, ganaría 1,23 millones de chelines.

“Garantizar que los servicios públicos deseados se brinden de manera rentable y fiscalmente sostenible requiere una gestión eficaz de los costos laborales”, dijo la SRC en un comunicado.

El presidente en ejercicio, Uhuru Kenyatta, que busca la reelección en agosto, dijo en marzo que debería reducirse la masa salarial general.

Dijo que los salarios consumían la mitad de todos los ingresos y obstaculizaban el gasto en proyectos de desarrollo en Kenia, un país sumido en la pobreza y donde la tasa de desempleo ronda el 40 por ciento.