Uno de los inventos que más ha empoderado a la sociedad son las redes sociales; poder conectarse rápida y directamente con cualquier persona con una conexión a Internet, las redes sociales nos permiten a usted o a mí hablar directamente con el presidente de México o los Estados Unidos o con su estrella de rock favorita y, si nuestra comunicación es lo suficientemente fuerte e inteligente, eso presidente o estrella de rock podría habernos leído y contestado; algo que simple y llanamente no hubiera sucedido en otro momento.
Las redes sociales también han democratizado la tecnología a favor de la sociedad. En el mundo virtual de las redes sociales no importa realmente quién eres, tienes la misma oportunidad de ser escuchado que los más ricos o los más pobres en esa red social, lo que importa es el ingenio y la potencia del mensaje que envías. ¿Los jueces? La audiencia, los miles de millones de seguidores en las redes sociales son los que hacen que el contenido sea masivo y popular, o no.
Este gran invento no podría ser perfecto y, por supuesto, tiene su lado débil; Ha sido tan fácil engancharse a las redes sociales, llegar a mucha gente y poder vender productos que simplemente hemos dejado de lado otras formas más convencionales y la adicción a las redes se ha vuelto, para muchas personas y empresas, más que peligrosa.
El 4 de octubre, las redes sociales Facebook, Instagram y WhatsApp sufrieron un declive en su comunicación; durante más de seis horas, miles de millones de personas han perdido la capacidad de comunicarse a través de estas redes. Esto es algo normal, la tecnología tiene fallas y fallas pero la adicción a estas redes sociales es tan fuerte que muchos simplemente se han olvidado que el celular también se usaba para hablar o que los clientes pueden estar fuera de la red y por casi un ‘entero trabajo día que perdieron pedidos y ventas.
Según un estudio de Wearesocial, en colaboración con Hootsuite, destaca que a fines de 2021 en México, 100 millones de personas están conectadas a una red social, más de 95 millones de mexicanos están conectados a Facebook y más de 91 millones están conectados a WhatsApp. Sin duda, son las plataformas que más alcance tienen en nuestro país y esa “caída” tiene un gran impacto.
Este gran “apagón” del que fue víctima una de las empresas más importantes del mundo, Facebook, dejó claro que muchos de nosotros no tenemos un plan B en nuestro día a día, que nos habíamos perdido hablar de él y Lo había intercambiado vía SMS o mensajes vocales.
Que la adicción es muy grande y que, al menos algunos de nosotros, nos habíamos olvidado lo que es no recibir un mensaje de WhatsApp durante más de cinco minutos. Sumergidos en la vida cotidiana y en el torbellino de la inmediatez olvidamos que un respiro es necesario y que se disfruta y es necesario.
* Director de Comunicaciones Corporativas de LG México
@daguilargallego
“Infuriatingly humble problem solver. Avid beer connoisseur. Web enthusiast. Hipster-friendly TV evangelist. Bacon guru.”